El pueblo de Jávea, donde nació hace 37 años David Ferrer, le ha vuelto a dedicar una muestra de cariño a uno de los tenistas más prolíficos de la historia de España. Desde este sábado, Ferru ya tiene su propia escultura en el municipio alicantino, obra de Víctor Goicoetxea. Además, ubicada en el antiguo paseo del Arenal, que ahora lleva su nombre.
El acto en el que se descubrió la estatua congregó a centenares de vecinos, muchos de ellos jóvenes tenistas de su Academia, Ferrer agradeció el cariño mostrado. «Siempre me he sentido muy orgulloso de este pueblo. Ahora creo que soy más profeta que nunca. Estar aquí en Xàbia es un privilegio», afirmó en declaraciones recogidas por Xàbia al día. La obra está situada, en concreto, a la altura del jardín que hay junto al restaurante La Fontana.